Existen muchas maneras de buscarle significado a la vida, pero no muchas personas están dispuestas a sumergirse en la autoexploración para salir fortalecidos, y arraigar en ella sus principios y valores, como lo ha hecho Alex Gutt con la espiritualidad judía.
Si bien hoy es consciente de su paz interior y de su conexión con Dios gracias a sus estudios de la Torá, el camino para llegar a ello estuvo plagado de dudas, de incertidumbre por encontrar la verdad más allá de sus creencias religiosas.
Cuenta que desde muy joven sintió la curiosidad de buscar a Dios, lo que evidentemente le llevó a investigar las diversas religiones que existen y encontrar cuál de ellas le daba las respuestas que necesitaba.
Como hombre de negocios que comandó por años una de las empresas líderes en el mercado venezolano de la juguetería, conoce de cerca el proceso de reinvención de la vida.

Tabla de contenido
Todo empezó por Gregorio Gutt…
En la década de los 30 del siglo pasado, la familia Gutt vivía en un pequeño pueblo ucraniano llamado Shyroke. Para ese entonces, Europa empezaba a sumergirse de antisemitismo, la cual reventaría con la Segunda Guerra Mundial.

Ante tal escenario, Gregorio comenzó a buscar alternativas de salida para una vida mejor. Así fue como decidió marchar primero hacia Alemania, donde conoció a su esposa, y tras un periodo, decidió irse hasta Bogotá, donde ya estaba establecido Morris Gutt, uno de sus hermanos.
Estando en la capital colombiana, decidió invertir todos sus ahorros en porcelana traída de Japón, para iniciar un nuevo negocio. No obstante, la vida le tenía una nueva movida.
Una actitud positiva ante el cambio
Un golpe de estado en 1953 liderado por Gustavo Rojas Pinilla, puso en vilo a Colombia y por ende, no se permitía el arribo de barcos al país. Desesperado, don Gregorio debió buscar el puerto más cercano para recuperar la mercancía.
¿Y cuál era ese puerto? Nada más y nada menos que La Guaira. Así fue como terminó por mudarse a Caracas, para posteriormente invitar con él a su esposa y sus hijos; Álvaro y Jaime, quienes ya habían formado sus respectivos hogares por separado, lo que marcaría el destino de la familia Gutt en Venezuela.
Alicia Ray Gutt: La Tatcher criolla…
Alex cuenta que su madre, Alicia, desde chica tuvo que aprender a llevar las riendas del hogar y tomar decisiones difíciles. Aunque nacida en Manchester (Inglaterra), y criada en Barranquilla (Colombia), razón por la cual era conocida en el trabajo con el apodo que hacía referencia a la ex primera ministra del Reino Unido, debido a su cultura británica, el orden y la determinación con la que lideraba.
Desde muy joven, ayudó en la crianza de sus sobrinos, hecho que sumado también a su temprana viudez, forjaron su carácter, lo que le permitió dirigir la parte administrativa de la empresa durante años.
Administración de empresas y el despertar espiritual

Para Alex, el replanteamiento de sus creencias comenzó justamente cuando empezó a estudiar Administración de empresas. Cuenta que en un principio se había obsesionado con aprender a ganar más.
Debido a la influencia de textos de filosofía y algunos de corte marxista, comenzó a reflexionar en lo banal del dinero, en las carencias de los menos afortunados. Se volvió muy filosófico, en sus propias palabras: se sentía confundido sobre cuál era el verdadero significado de la vida.
Pensando en justicia social, quiso realizar la tesis de grado con una asociación sin fines de lucro, lo cual se concretó de la mano del padre de Isack, el Dr. Ruben Merenfeld quien era oncólogo de profesión, y le ayudó a conectar su proyecto con el Hospital Padre Machado.
Un día, buscando respuestas, decidió consultar en la Torah y estudiar las sagradas escrituras para hallar las respuestas. Fue de tanto analizar, que de pronto se dio cuenta de que necesitaba saber si estaba buscando en el lugar correcto.
En esa autoindagación de saber en cuál religión hallaba a Dios, adquirió el libro Religions of the world. Sin embargo, Alex tenía claro un punto: descartar la idolatría, lo que reducía sus posibilidades ínfimamente, así que se quedó con el Islam y el Judaísmo.
En este proceso, retomó sus tefilín mientras se preparaba para su MBA. Paralelamente, comenzó a atender una sinagoga en Miami, una vez más; academia y espiritualidad iban a la par en su vida. Finalmente, lo que inició como un proceso interno de dudas, afianzó su fe en el judaísmo.
En palabras del mismo Alex, después todo esto le hizo entender que su fe iba más allá de ciertos preceptos, es un modo de experimentar y vivir la vida. Y así como en un principio se le abrieron varios caminos hacia otras religiones, comenzó a conocer varias ramas del judaísmo hasta anclarse en el Jasidut Jabat.
Uno de los aprendizajes de Gutt en sus estudios de la Torá es entender que “hay que saber quitarse la camisa”, es decir; sacrificarse por quien lo necesite, como ha hecho Myrna Hirschhaut Vaisberg al donar parte de su hígado.
La familia Gutt: sus principios y valores a nivel empresarial
La vena empresarial late en los Gutt. Tanto el ala de la familia que se estableció en Caracas, como la de aquellos que decidieron seguir en Colombia crecieron enormemente y marcaron un hito económico en sus respectivos países.
Así, los Gutt se convirtieron en líderes de dos nichos importantes del mercado: por un lado, Grasco, empresa dedicada a la producción de aceites y grasas comestibles, y por el lado de Venezuela, la recordada General Import.
Más que juguetería y artículos para el hogar
Buena parte de los venezolanos recuerdan aquel local ubicado en San Jacinto, donde era muy común adquirir artículos para el hogar y juguetes de Navidad o cumpleaños para los más pequeños.
Pero esta empresa fue forjada en parte gracias al liderazgo de su madre, quien al tomar las riendas de los negocios de su fallecido esposo, logró sacar adelante el negocio familiar y a sus tres hijos.

Empezar de nuevo: el desafío de 2Good Corp
A los Gutt, como a millones de venezolanos, les tocó emigrar y empezar a construir sus vidas nuevamente. Con toda la experiencia que traían de su país natal, Alex y Greg, primos de tercera generación del fundador, iniciaron un desafío en retail online con la empresa 2Good corp: Earn, Trust & Deliver Smiles (ganar confianza y entregar sonrisas).
Si algo le queda en claro a Alex es que de todas estas experiencias de vida, es aplicar tres puntos importantes que son el eje de su manejo empresarial, como lo son:
- Inspirar una actitud positiva.
- Abrazar y manejar el cambio.
- Responsabilidad.



Historias que contar con Alex Gutt
Esto que te hemos contado es solo un abrebocas de la maravillosa historia de vida de Alex Gutt, así que te invitamos a que revises la entrevista completa que le hemos realizado, así como el resto de encuentros.
¡Qué lo disfrutes!
Otras Historias que contar
- Myrna Hirschhaut Vaisberg: El milagro de ser donante de hígado
- Luis Vicente García Giliberti: ¡Historia de dos Ciudades!
- Joe Rubinsztain: Inspiración para el liderazgo en innovación tecnológica
- Isack Merenfeld: Un tercio de vida en tres países
- Historia de Resiliencia Dana Levy: La odontóloga que hizo camino en Canadá para otros latinoamericanos
Apreciado Alex mi nombre es José Luis Andrades , mi padre fue empleado de las empresas Gutt y cuando el murió yo mismo tuve esa oportunidad. Precisamente hoy día 27 escribí un recuerdo hacia ustedes con gratitud por lo que tu familia significó para la mía sobre todo para tu Apreciada mamá la Sra Ray de quién conservo un cariño y gratitud muy especial, me impresiona mucho el camino que has hecho…al salir de General Import siempre he trabajado en temas Sociales…fuerte abrazo.
Muchas gracias por su comentario José Luis, se lo haremos llegar a Alex para que le responda y le dé su gratitud.
En nombre del equipo de MIH
Tamara
Muchas gracias por la respuesta me alegra mucho que Alex y su querida mamá reciban mi saludo he visto la entrevista Tamara… excelente la felicito
Millones de gracias ….Historias que contar¡¡¡¡